¿Qué hacer para conocerse a uno mismo?

“Nosce te ipsum” ya aparecía en el Santuario de Apolo, en Delfos. «Conócete a Ti mismo y conocerás el Universo y los Dioses” es un complemento que nos viene a indicar la importancia que tiene para el Ser Humano su propio conocimiento. Y que, a través de él, no solamente puede entenderse a sí mismo sino acercarse a la comprensión del Universo en el que está inmerso. (by http://www.acropoliscordoba.org)

Hace unos días, un compañero me preguntaba «¿qué podemos hacer para conocernos mejor?, ¿cómo podemos conocer nuestros puntos fuertes y débiles?»

– Ponte a prueba. Sal de tu zona de confort (esto, que suena de pm, se dice mucho en las conferencias, la «zona de confort»…). Si no te enfrentas a retos y siempre haces lo mismo, poco vas a conocer nuevo. Explora tus emociones, haz teatro, juega, márcate objetivos… lo que sea, pero haz algo nuevo por dios.

– Analiza y evalúa resultados. No suele ser nuestra devoción, pero es clave encontrar momentos para evaluar de forma realista tus acciones, y reconocer lo que no has hecho bien. Si no lo haces estás limitando tu autoconocimiento. No te martirices ni te lamentes (of course nada de quejas), pero sí evalúa, sin más.

– Una de mis favoritas: pregunta a los que te rodean (ojo, previa criba de perfiles…) por tus virtudes y tus defectos. Insiste, que se mojen. Pregúntate a ti mismo, en vez de buscar explicaciones y razones a todo.

– Piensa en clave triángulo PENSAR – SENTIR – HACER. ¿Qué pienso para sentir esto? ¿Qué siento para pensar esto? ¿Qué pienso para hacer esto? ¿Qué hago para sentir esto? … todas las combinaciones posibles.

– Haz coaching.

Aquellos que adopten esta actitud, esta predisposición, son los que entrarán en el círculo virtuoso del autoconocimiento y, en consecuencia y en principio, del autocontrol.

Y tú, ¿cómo lo haces para conocerte mejor?